Turismo de bienestar, una oportunidad para reactivar la industria de viajes
Este segmento se impone como tendencia del turismo a nivel mundial. ProColombia cuenta el potencial que tiene el país para ofrecer este tipo de experiencias que conecten a los viajeros con la naturaleza y la cultura.
Hoy la demanda por actividades turísticas relacionadas con el bienestar ha incrementado. Así lo indican diferentes organismos especializados en turismo a nivel mundial con el argumento de que la pandemia cambió los intereses de los viajeros.
La Adventure Travel Trade Association (ATTA), por ejemplo, hizo un estudio a finales de 2020 en el que concluyó que el turismo de bienestar es una de las diez experiencias de mayor tendencia con otras actividades como trekking, cultura, gastronomía, expediciones y ciclismo y, además, indicó que en Suramérica este segmento es la quinta experiencia más demandada.
Por su parte, la Organización Mundial del Turismo define a este segmento como una actividad turística que aspira a mejorar y equilibrar los ámbitos principales de la vida humana, entre ellos el físico, el mental, el emocional, el ocupacional, el intelectual y el espiritual y, en este sentido, Colombia se convierte en el destino ideal para este tipo de experiencias, pues durante los últimos años ha fortalecido su oferta, la cual, además, se ha preparado ante las nuevas tendencias resultado de la pandemia.
Este tipo de actividades están acordes a la actualidad, pues de acuerdo con la firma estadounidense Dynata, la pandemia trajo una mayor preocupación por la salud mental. Según la empresa, cuatro de cada diez consumidores encuestados informaron un incremento de la ansiedad o estrés durante la pandemia, por lo que los viajes podrían ser una forma de reducir este impacto negativo, dando también una oportunidad a los productos de relajación y bienestar.
Ante este interés creciente, se suma una gran proyección económica. De acuerdo con el Global Wellness Institute, las actividades de bienestar a nivel mundial mueven cifras por alrededor de US$3,5 billones, de los cuales US$639 millones pertenecen al turismo, siendo uno de los segmentos que más generan activos luego de las categorías de cuidado personal, actividad física y nutrición. La misma organización internacional prevé que para 2022 esta industria alcanzará los US$919 billones en ganancias.
“Nuestra ubicación geográfica y las seis regiones que componen nuestro territorio nos hacen un destino ideal para que viajeros de todo el mundo vivan experiencias de bienestar únicas que solo se encuentran en nuestros destinos. Además, este tipo de actividades están acorde a las tendencias producto de la coyuntura. Hoy podemos decir que el turismo de bienestar se convierte en un segmento clave para la promoción de Colombia como destino turístico, lo que sin duda aportará a la reactivación de la industria”, explicó Flavia Santoro, presidenta de ProColombia.
Por su parte, Ostelea, la escuela de management de turismo en España, indicó recientemente que: “si el interés por experiencias y destinos vinculados con la salud y el bienestar era ya significativo, la actual pandemia producida por el Covid-19 aleja las dudas sobre la importancia que tiene la salud de las personas, no sólo a nivel individual o familiar, sino también para el buen funcionamiento de la economía y la sociedad en su conjunto”. Lo anterior lo confirma
¿Cuál es la oferta en Colombia?
De acuerdo con ProColombia, se han identificado estos nichos en el producto de turismo de bienestar: centros de bienestar, spas, termales, tradiciones ancestrales, retiros espirituales y viajes conscientes. Es así como en el país existen operadores y agencias de viajes especializadas en este segmento, las cuales han preparado una oferta diferente aprovechando la gran diversidad natural y la historia cultural (tradiciones ancestrales)del país. Estos son algunas de las experiencias transformadoras que existen en Colombia:
Viaje de conexión con la selva
Este es un viaje que se hace a los Cerros de Mavecure, ubicados en Guainía, en donde durante cinco días los viajeros se conectan con la energía poderosa de estos majestuosos monolitos haciendo senderismo por sitios históricos, religiosos y míticos. Durante el viaje, se hacen recorridos por las aguas de diferentes ríos, que varían de colores que van del azul profundo al negro intenso en donde, además, existe la oportunidad de acampar a sus orillas. También las comunidades indígenas hacen parte activa de las experiencias, quienes comparten su sabiduría ancestral para ayudar a sanar.
Sanación con ballenas
Esta experiencia se puede hacer en frente de las costas del Chocó, región de vastas selvas, cascadas, aguas termales y playas paradisiacas. Es el espacio sagrado en donde cada año, de julio a octubre, llegan las ballenas jorobadas para hacer su danza de amor para dar luz a sus ballenatos. Los viajeros tiene la oportunidad de entrar a las aguas pacíficas y conectarse a través de la meditación con la energía de estos majestuosos animales. Además, a este viaje también se puede sumar una experiencia en el Paisaje Cultural Cafetero, específicamente en la zona cafetera de Quimbaya.
Sanando con el agua y los cristales
Muy cerca al municipio de La Macarena, en el Meta, se encuentra Caño Cristales conocido como el río de los cinco colores. Allí existen experiencias como talleres, meditaciones guiadas y otras actividades para que los viajeros dejen a un lado sus dolencias físicas y emocionales y despierten la conciencia y el renacer. El propósito es que, con los colores del agua y la sanación cuántica, se haga una limpieza de chakras y se trabaje con cristales para aumentar la luz interior.
El encuentro de tres mundos
En los territorios de Boyacá vivieron los Muiscas, los más aguerridos guerreros, defensores de sus tierras y de su comunidad. Ellos, ancestros de los campesinos, dejaron un legado de cultura, artesanía y amor por cultivar la tierra. Y esta es precisamente la experiencia que se busca vivir a través de un recorrido de por el altiplano cundiboyacense para descubrir un territorio ancestral que guarda tradiciones de indígenas y campesinos. El objetivo es vivir la esencia de su cultura, artesanías, alimentación y conexión con la tierra.
Sabiduría ancestral en La Guajira
Este viaje consiste en visitar el Pilón de Azúcar, una pequeña montaña con miras hacia el mar y que se ubica a tres horas al norte de Riohacha, en el Cabo de La Vela. Este es un lugar sagrado que sirvió de guía a los primeros pobladores que navegaban perdidos por las aguas del mar Caribe. Esa cima es adorada por los indígenas Wayuu en su lengua en wayuunaiki le llamaron Kamaici, que significa “señor de las cosas del mar”. El viaje se complementa con la visita hacia otros puntos sagrados de La Guajira, en donde los viajeros se pueden conectar con los elementales de la naturaleza de la siguiente manera: mental-tierra, física-aire, emocional-agua y espiritual-fuego.