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En diferentes lugares del mundo ha empezado la reactivación del sector por medio de protocolos y medidas de bioseguridad. El éxito de la apertura dependerá de la adaptación de los minoristas para garantizar la seguridad tanto de los compradores como de los trabajadores, que a su vez representa una oportunidad para la comercialización de los elementos de protección.
A medida que avanza el proceso de reapertura económica, los gobiernos nacionales han manifestado la necesidad, y en algunos casos la obligatoriedad, de hacer uso de elementos de protección personal para salir a la calle.
Es así como la &lsquo nueva normalidad&rsquo permitirá un aumento en la demanda de telas y acabados antibacterianos, y en el caso de las mascarillas, éstas se harán mucho más presentes con diseños diversos para uso cotidiano en espacios públicos.
Reino Unido
Después de tres meses de cierre obligatorio, el Reino Unido ha reabierto el comercio no esencial desde el 15 de junio, como parte de los planes de reactivación económica.
A la fecha, todas las tiendas en el territorio pueden abrir, siguiendo la guía impuesta por el gobierno que detalla las medidas que deben tomar para cumplir con los estándares de distanciamiento e higiene necesarios. Algunas de las medidas de seguridad incluyen pantallas de plástico en las cajas registradoras y marcas en el piso para mantener a los compradores a dos metros de distancia adentro y afuera de las tiendas. Otras medidas se centran en la disponibilidad de desinfectante para los clientes y la descontaminación de canastas de compra después de cada uso. Algunas de las tiendas de ropa han decidido cerrar sus vestidores mientras que otras han habilitado solo uno o dos para evitar el contagio, y en el momento del pago solo se aceptan tarjetas o pagos sin contacto como lo ha hecho la tienda Selfridges. Algunas marcas han implementado sus propias prácticas para poder distinguirse y atraer a los clientes a sus tiendas.
Springboard, una compañía que mide el número de clientes potenciales en los puntos de venta minoristas en el Reino Unido, indicó que el tráfico en las tiendas en la semana de reapertura incrementó en un 45% comparado con la semana anterior.
España
En España, la reactivación del sector retail comenzó en las ciudades que se encuentran en la fase dos de la desescalada diseñada por el gobierno.
En cuanto a los pequeños comercios y los centros comerciales, se estableció su apertura con una capacidad del 40% y una distancia mínima de 2 metros entre los clientes y empleados.
Un ejemplo de lo anterior, es el caso de la firma irlandesa de moda ´ low cost´ , Primark, queimplementó un protocolo estricto de distanciamiento social en sus tiendas, de acuerdo con las pautas obligatorias gubernamentales. La marca estableció un control del aforo de sus tiendas, el cierre temporal de los probadores, y pagos con tarjeta y ´ contactless´ para minimizar el uso de efectivo. Además, ha intensificado la limpieza de sus espacios y la disponibilidad de artículos de protección personal, como mascarillas y guantes para los empleados, y desinfectante para clientes.
Estados Unidos
El sector retail en Estados Unidos empezó su proceso de reactivación desde mayo, con una gran cantidad de tiendas que abrieron sus puertas nuevamente al público.
La ciudad de Nueva York, una de las más afectadas por el COVID-19, oficialmente entró a la fase 2 de reapertura a finales de junio, permitiendo que por primera vez en meses los clientes pudieran comprar dentro de establecimientos minoristas.
Por su parte, se estableció que en Boston las tiendas de ropa tuvieran que limitar el número de personal al 40% de su capacidad anterior, y controlar que no hayan más de 8 personas por cada 1,000 pies cuadrados incluyendo al personal. Por esta razón algunas marcas han decidido quedarse con la modalidad de " pickup only&rdquo o de hacer solo citas.
Al igual que en otros países, las tiendas estadounidenses deben seguir las rigurosas pautas de los gobiernos estatales, implementando distanciamiento social, medidas de capacidad para evitar el contagio y el uso obligatorio de tapabocas.
Asia
Como parte de las tendencias que se proyectan para la &lsquo nueva normalidad&rsquo se encuentra la del uso de mascarillas de protección como un accesorio de moda habitual en las personas. En Asia, esta pieza ha estado integrada a la cultura popular desde hace tiempo debido a la preocupación por la contaminación ambiental y a las influencias del streetwear, por lo que se espera continúe presente en el contexto actual generado por el coronavirus.
De hecho, la demanda constante de esta prenda de protección personal se ha hecho más visible en países como Japón tras el debut de las mascarillas faciales &lsquo cool and dry&rsquo de Uniqlo el pasado 19 de junio. En esa fecha el exceso de solicitudes de compra llevó a que las plataformas digitales colapsaran y las existencias se acabaran prontamente, dejando a varias personas a la espera de adquirir el producto, que cuenta con tres capas con filtro para bloquear bacterias, polen e incluso los rayos ultravioletas, y se comercializa como fresco y de secado rápido.
