El acceso preferencial, sumado a nichos específicos con oportunidad y una demanda constante han hecho de Estados Unidos un mercado prioritario para los exportadores colombianos de autopartes.
Para la muestra, es el sector con el mayor número de empresas nuevas exportando desde la entrada en vigencia del tratado de libre comercio el 15 de mayo de 2012. Desde entonces y hasta diciembre de 2013 fueron 641 autopartistas los que vendieron sus productos por primera vez a ese mercado, de acuerdo con información del Ministerio de Comercio, Industria y Turismo, con datos del Dane.
Además, se han exportado nueve productos nuevos como modelos específicos de vidrios de seguridad, algunas partes de amortiguadores y correas de repartición.
Al cero arancel se le suman los nichos de mercado que ha identificado PROCOLOMBIA Colombia. " Ya iniciamos un trabajo con el gremio de tractores, en donde hay oportunidades que están aprovechando los exportadores, pero también está el de carros cortadores de césped y buses escolares&rdquo , explicó María Claudia Lacouture, presidenta de la entidad.
Son varios los casos del trabajo. TI Automotive Bundy Colombia, una de las empresas que empezaron a exportar gracias al acuerdo comercial, lleva 50 años en el mercado colombiano, cuenta con experiencia en Ecuador y Venezuela, y ahora le vende frenos y líneas hidráulicas a un fabricante de tractores en Georgia, Estados Unidos. " Nuestro objetivo este año es empezar a crecer buscando más clientes en ese tipo de nicho, que no maneje volúmenes altos sino medios o bajos que es lo nuestro&rdquo , afirmó el gerente comercial, Ronald Martínez.
Su experiencia le ha servido para saber que las empresas que demandan volúmenes medios o bajos exigen una mayor calidad y sus exigencias técnicas son más altas que cuando piden volúmenes mayores, negocios que se tranzan generalmente con otros proveedores como los asiáticos.
Por eso los esfuerzos por mantener la calidad de los productos es lo que les está dando resultados a los exportadores colombianos.
Un caso similar es el de Fundicom. La empresa tiene 45 años de creada y desde 2011 empezó a considerar a Estados Unidos como su prioridad. " Es un mercado muy grande con varios nichos por aprovechar. Ahora le vendemos diferentes partes para frenos a una empresa que fabrica vehículos que se utilizan para transportar insumos en las granjas&rdquo , sostuvo Edwin González Arias, gerente general.
El negocio va hasta por ocho años, les va a representar ventas por US$16 millones y ya superó a su principal cliente en Colombia que es la General Motors Por eso ahora están motivados para seguir buscando clientes en Estados Unidos. " La ventaja que tenemos es que en la práctica podemos atender cualquier nicho, por ejemplo ferrocarriles, construcción, minería y acueductos&rdquo , añadió González.
Otro aspecto importante del mercado, según Gustavo Becerra, gerente general de Guayas B & G, es que permite planear estrategias a largo plazo. " Es un mercado estable y que da frutos. Eso sí hay que lucharlo. Son muy pragmáticos porque pueden comparar todo con todo el mundo, como en materia de precios y calidad. Uno tiene que llegar es con valores agregados de servicio, con despachos más oportunos&rdquo .
Su empresa se dedica desde hace 50 años a vender equipo original y desde 2011 venden partes para la línea de ensamble de tractores.
Dimensión del mercado
Según Trademap, Estados Unidos es el principal importador de autopartes en el mundo. Además, año tras año sus compras en el extranjero vienen en ascenso: en 2010 totalizaron US$96.264 millones, en 2011 llegaron a los US$112.827 millones, y en 2012 subieron a US$127.510 millones.
Entre los principales cinco proveedores se encuentran México, China, Japón, Canadá y Alemania. Colombia, por su parte, ocupó la posición número 46 con exportaciones que llegaron a los US$34,3 millones en 2012. En 2013 el total fue de US$27,2 millones.
La industria de accesorios para automóviles abarca todos los productos y servicios adquiridos por vehículos ligeros, medios y pesados, incluyendo piezas y repuestos, accesorios, lubricantes, productos de apariencia, neumáticos, reparación de colisiones, así como las herramientas y equipos necesarios para realizar la reparación.
En cuanto al canal de distribución lo constituyen las ensambladoras y los distribuidores mayoristas. Estos últimos le venden partes para automóviles al Gobierno, a distribuidores minoristas y, en algunos casos, a centros especializados.